La victoria de Eslovenia ante Grecia aclaró las combinaciones que deberían darse para que España se clasifique o no para cuartos en la última jornada de la segunda fase.
Sólo se quedaría fuera en el caso de perder si, además, Grecia ganase a Croacia y Eslovenia a Finlandia. Si España pierde, pero Croacia gana a Grecia, pasaría como cuarta de grupo. También se clasificaría en esa posición a pesar de perder si los helenos venciesen a los croatas siempre que Finlandia ganase a Eslovenia, algo poco probable.
Si España no quiere depender de caprichosas carambolas, debe ganar a Italia. El triunfo la clasificaría directamente para cuartos de final y lo único que cambiaría sería su posición en el grupo.
Accedería a cuartos de final como tercera si Croacia gana a Grecia. Lo haría como segunda de grupo si Grecia gana a Croacia y Eslovenia a Finlandia. E incluso podría pasar como primera si Grecia gana a Croacia y Finlandia, con remotas opciones de clasificación, sorprende a Eslovenia en el partido que cerrará la segunda fase el lunes.